¿Sabías que la meditación te ayuda a perder peso?

Un hábito ideal para después de una operación de balón gástrico

Durante los últimos años la meditación ha sacado a la luz los múltiples beneficios que ofrece para la salud física, mental y espiritual de las personas. De allí que, cada vez obtenga mayores adeptos y su popularidad vaya en crecimiento. No es de extrañar, entonces, que en la actualidad sea usado como una herramienta que complementa a tratamientos y procedimientos médicos. Se trata de un hábito que vale la pena cultivar y poner en práctica para nuestras vidas. Sobre todo, si te has realizado una operación de balón gástrico. ¿Por qué? La respuesta es muy sencilla, para esta clase de pacientes lo más importante es perder peso y la meditación es una herramienta que te permite lograrlo ¿Lo sabías? ¡Aquí te lo contamos todo!

Los beneficios de la meditación para perder peso ¿Mito o realidad?

Son diversas las investigaciones que hablan acerca de cómo la meditación es capaz de ayudar a sanar múltiples enfermedades. Incluyendo, los problemas de adicción y vicios. De allí que, sus aplicaciones abarquen los cambios de hábitos para lograr una vida plena y positiva. Los hábitos alimenticios no escapan de ello. En consecuencia, el tema de la pérdida de peso se ve influido directamente. Perder peso no es una tarea fácil. Son múltiples los métodos que se usan para lograrlo. Desde dietas, ejercicios, pasando por intervenciones quirúrgicas hasta medios alternativos. Cada uno de ellos es usado para lograr alcanzar el peso ideal. En muchas ocasiones sin poder lograrlo.

Gran número de estudios coinciden en el hecho de que la meditación ayuda a hacernos más conscientes de nuestros pensamientos y acciones. Por ende, esta práctica permite que seamos consecuentes con las sensaciones de hambre y saciedad. Controlando esto, podremos regular nuestra capacidad de ingerir alimentos, logrando controlar lo que comemos y las cantidades que ingerimos.

La meditación, a su vez, controla la ansiedad y el estrés. Reduciendo el deseo de comer que este sentimiento ocasiona. Si meditamos controlaremos las ansias de comer de forma compulsiva. Tendremos consciencia de la calidad de los alimentos que consumimos. Evitando la comida chatarra y las frituras. La meditación nos hace fluir por un estilo de vida donde los vegetales y las frutas son siempre nuestra primera opción. Los beneficios de la meditación para perder peso pueden ser tan reales como tu voluntad de que así sea. ¿No has tenido éxito perdiendo peso? Ésta es una posible solución al sobrepeso.

Un método para perder peso que corrige patrones mentales

Meditar nos hace centrar la atención en cada acción que realizamos. Comer es una de las acciones que hacemos diariamente casi sin darnos cuenta e instintivamente. Al meditar comemos con atención. Esto significa que prestamos interés en lo que comemos y en cómo lo hacemos. Es decir, cantidades, tipos de alimentos, horas de la comida, número de raciones, entre otras variables que si sabemos controlar nos ayudan a perder peso.

La práctica de meditar corrige patrones mentales negativos. El uso de mantras o afirmaciones nos hacen cambiar nuestra codificación mental. Afirmaciones como “Soy sana y delgada”, “Como sólo lo que necesita mi cuerpo”, “Me siento satisfecha y feliz” “Merezco comer saludablemente” Son mantras que nos ayudan a alcanzar objetivos como el adelgazar. Perder peso si es posible, a través de este método. La idea es dejar atrás los malos hábitos, entre ellos el de comer insanamente o en exceso.

Esta práctica ha demostrado que, se transforman los patrones neurales y cada afirmación se convierte en una acción. Se reduce la acción de comer por ansiedad y se favorece la pérdida de peso. Resulta que, al ser más conscientes de lo que sucede en nuestro interior y las causas que originan ciertos comportamientos sanamos. Entender nuestro cuerpo, saber cuándo sentimos hambre verdaderamente sin dejarnos engañar por los antojos y la ansiedad es fundamental para lograr adelgazar. Debemos comer sólo lo que nuestro cuerpo necesita y cuando éste lo pide. Lo demás está de sobra. Y, es precisamente el no hacerlo de esta forma lo que nos hace engordar.
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Psicología bariátrica

Entendamos que, la cirugía del balón gástrico es una opción que se usa en pacientes que han gastado todas las alternativas existentes para perder peso sin alcanzar el éxito. Por lo general, es la última opción que se maneja hasta que se hayan agotado todas las medidas posibles y están han resultado no efectivas.

No obstante, esta cirugía no se trata sólo de una intervención quirúrgica y del uso del bisturí. Para un resultado exitoso es imperativo que el procedimiento vaya acompañado de un cambio en la forma de vida del paciente. El cual, involucra la transformación de hábitos, la adquisición de nuevos y positivas acciones. Y, sobre todo, la toma de consciencia sobre la importancia del bienestar del cuerpo para mantener la salud y la calidad de vida que merecemos.

A todo esto, se le denomina Psicología bariátrica. Consiste en que el paciente aprenda a cambiar las conductas alimenticias negativas y nocivas que arrastra del pasado y que lo han llevado a padecer de obesidad. Antes de realizar la operación del balón gástrico es necesario evaluar las capacidades y voluntad de la persona para asumir los cambios de vida que serán para siempre y que implican esta cirugía. Para ello, es necesario que el paciente tome consciencia de su enfermedad, de las causas y las consecuencias que esta acarrean para su salud. Más importante aún, que entienda que en sus manos está la responsabilidad para sanar y vivir plenamente.

La transformación de los hábitos alimenticios es fundamental si deseas perder peso después de una operación de balón gástrico.

La meditación es la mejor herramienta de la psicología bariátrica

Después de realizarse la operación del balón  gástrico, manga gástrica, bypass gástrico u otro tratamiento para la obesidad semejante es necesario realizar psicoterapia. Una de las mejores herramientas de este tratamiento resulta ser la meditación. La cual, como mencionamos en líneas anteriores, ayudan a cambiar y crear nuevos hábitos de vida.

Hay que tener en cuenta que, si no se cambia la forma de alimentarse y el estilo de vida que deberá incluir el deporte y la actividad física. El paciente corre el riesgo de volver a ganar peso. Perdiendo, así, todo el tratamiento y operación. Aunque, la cirugía como tal garantiza la pérdida de peso, llegará un momento en que se produzca un estancamiento. Y, en consecuencia, el irreversible efecto rebote. Para evitar esto, es necesario tomar cartas en el asunto. Meditar es una forma de adquirir un estilo de vida ideal después de realizada esta operación.